Santo Domingo, 22 de Enero.- El presidente de la Suprema Corte de Justicia y del Consejo del Poder Judicial, Luis Henry Molina Peña, aseguró este miércoles que se precisa una transformación que elimine las dilaciones en las decisiones judiciales y las trabas que afectan el clima de negocios en el país y solicitó el respaldo del liderazgo económico al plan estratégico Visión Justicia 20/24.
“Toca disponernos, sin prisa pero sin pausa, a reglar los procedimientos internos de nuestros tribunales para asegurar que conducen al establecimiento de estándares y usos que mejoren la situación”, expuso Molina Peña al participar como orador invitado en el primer almuerzo de la Cámara Americana de Comercio de República Dominicana (Amchamdr) de este año, con la asistencia de más de 250 empresarios.
“La calidad de las reglas jurídicas, la certeza de que éstas serán respetadas y la confianza en que las controversias se resolverán de manera oportuna e idónea es la base de cualquier emprendimiento económico y una condición indispensable para el desarrollo”, agregó el presidente del CPJ.
En su discurso, Molina Peña invitó a los sectores productivos y a la ciudadanía en general a conocer los detalles del Plan Estratégico Visión Justicia 20/24, que procura un acceso inclusivo a la justicia, que los servicios y resoluciones sean oportunos y eficientes y que la judicatura fortalezca su credibilidad gracias a sistemas de ética, disciplina y transparencia.
El presidente de la Alta Corte, quien el Día del Poder Judicial el 7 de enero prometió combatir la mora judicial por considerarla una amenaza al disfrute de la libertad, los bienes y los derechos de las personas, lamentó el bajo posicionamiento del sistema judicial dominicano como garante del clima de negocios en el país.
En la clasificación del Proyecto de Justicia Global, resaltó el magistrado, la justicia civil dominicana ocupa la posición 104 entre los 126 países estudiados en todo el mundo. En el regional, ocupa la posición 24 de 30 y en el renglón por nivel de ingresos, la posición 32 de 38, apuntó, para sostener a continuación que una mejor justicia puede apalancar aún más las tasas de desarrollo del país.
Indicó, sin embargo, que la transformación no debe ser tarea exclusiva de quienes integran el Poder Judicial, que debe involucrar, entre otros, al liderazgo económico y empresarial.